Y sin embargo y otros.

Ahora sólo consigo dormirme
pintando rallas en hojas en blanco,
errores...nada que ver sin ti.
Parpadeando entre telarañas
que merodean y se agitan y me azotan..
y sé de azoteas infinitas que nunca serán excusa
para que quieras bailar a dos centímetros
y aguantarte las ganas.

Manchémonos los pies de barro,
salpícame y deja de temblar,
qué importa que pasen 20 años
si no nos vamos a dejar matar...

"Sabes mejor que yo que hasta los huesos
sólo calan los besos que no has dado..
los labios del pecado"

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FRIO

Salgo a la calle...bofetón de aire frío.
No había llegado ya la primavera?
Imagino mi nariz ya colorada
y maldigo el tiempo...
una vez más.
Cierro los ojitos, reprimo
un escalofrío e intento olvidar
la sensación evocando tu cuello
y tu olor,una madrugada..
recordando como me reía,
cuando me llamabas loca
y te esforzabas,
aquella noche gélida de 4 grados,
por abrigarme.

Me doblabas los bracitos
mientras no hacía más que rebelarme
para que entendieras que la chaqueta,
en realidad,
tampoco era tan necesaria.
Que si te quedabas a esa distancia,
me sobraba la ropa.
Que si te empeñas en vestirme,
como no me voy a quejar?

Pero te dejé...
Me rendí en la lucha.
Conseguiste que me pusiera
la chaqueta,me la cerraste
con un gesto tiernamente amenazador,
al que respondí con la merecida carcajada.
No contento con eso, seguiste
con tu cometido y me ataste el jersei
un poco por encima de la cintura
para paliar el efecto que mis minijerseis
tienen en mis riñones congelados, decías.

Ingenuo.
Entre zarandeos y roces,
en algún momento,dejé de tiritar....
no lo notaste?
Claro que sí...
Pero el juego era divertido.
El alcohol lo hacía aún más excitante.
Los escasos centímetros eran todavía menos.
Tus reprimendas eran recibidas
con cara de pícara satisfacción,
Ves? Te dejé hacer..
No soy tan tozuda.
Bendito invierno aquel...
Dónde andaban los demás?
Yo me perdí de tu mano..

NO

No pienses en mi cuando remuevas la taza de café en el bar,
empapado por la lluvia;
cuando te recorra un escalofrío
te apartes el pelo mojado de la cara,
y pidas otro azucarillo para endulzar la amargura,
no cierres los ojos.
Mientras observas con despiste tus manos,
los dedos que haces tamborilear por la ansiedad
de tanto tiempo esperando nada,
no me recuerdes temblar mirándote.
No camines por el metro sonriendo
en un reflejo fugaz de algún momento
que mereció la pena,
ni mires con pasión a todos los valientes,
desafortunados,
que se dejan la voz y los dedos
en los pasillos de la vida subterránea
de la ciudad.
No bebas cada cerveza recordando mi boca,
ni dejes pasar la vida
maldiciendo entre recuerdos de humo
y besos fugaces,
locos, inesperados,
que quedaron atrás, quizá en otra ciudad.
No suspires en otros brazos ni nades en otros cuerpos,
si tus manos se deslizan aún en sueños,
por mi espalda..
No abuses de las resacas ni de las huidas
al recordar esa puta manía que tengo
de acariciarte las manos al hablar,
de abrazarte en cualquier momento insospechado,
de abrigarte...
y no esperar nada de ti.
No te ausentes en las conversaciones,
ni me imagines tarareando cada canción;
no me busques en las fotografías en palabras
de la vida de otros,
que no somos nosotros.
No pretendas comprender mis miserias,
ni te esfuerces en descubrir mis debilidades
ni me reproches que sea “tan corto el amor y tan largo el olvido”
mejor sospecha que soy feliz,
(pero no tanto)
No me pienses, ni me eches de menos;
No dejes que te ciegue ese ángel traidor
que llamas deseo pero que disfrazas de amor,
no vale la pena.
No pierdas el tiempo en nada de esto.
Ya lo hago yo cada día
en tu lugar..